Sépanlo: no fuí abducida por extraterrestres ni caí en un coma textil (!) producto del enamoramiento constante que siento al ver mi placard. Simplemente estoy ocupadísima con los preparativos pre-mudanza que se concretará este sábado próximo. Desde la mañana hasta entrada la tarde hay cosas para hacer y me asombra cómo los minutos rinden tanto en un mismo día. Hoy, por ejemplo, a partir de las 10 hs. estaban trabajando el plomero y el plastificador. Aprovechando eso nos fuimos a hacer unos trámites al centro, previo paso por una zinguería para comprar un tubo que necesita el extractor (tubo o coso, no sé bien cómo se llama). Luego nos fuimos a Once para comprar un barral que provisoriamente sostenga nuestra ropa en el placard. Concluído eso (Once es un lugar fascinante respecto de su mapa de negocios con zonas específicas para cada rubro) partimos a Belgrano para ver qué onda con el vanitory. Sabiendo que nos lo van a entregar durante esta semana, nos regalamos un almuerzo en Bahamas con una preciosa vista al río. Finalmente volvimos al departamento para ver cómo iban los arreglos que arrancaron tempranito. Y todo eso pasó desde las 10 hasta las 15 hs. ¡Sí que sabemos cómo hacer rendir el tiempo!
Cuento todo esto para excusarme de mi escasa producción bloggeril. Supongo que a partir de la próxima semana, cuando mi cabeza vuelva a sus razonamientos tradicionales, retomaré la actividad en este espacio que amo.
Como nota al pie quiero contarles que la semana pasada tuve la oportunidad de conocer a dos seguidoras de este blog. El martes me encontré a merendar en Nucha (¡¡rico!!) con anitalorileira, del blog Pink World. Ella es un encanto y lo divertido fué que no paramos de hablar desde que nos saludamos hasta que nos despedimos. Queda abierta la puerta de par en par para próximas salidas y horas de charla sin respiro.
Continuando con los encuentros, el sábado salía de Dot y en el estacionamiento una chica me llama por mi nombre y para mi sorpresa total era la estimadísima Polilla78 que me reconoció "por el blog". Una de dos: o es una excelente fisonomista o yo soy 100% fiel a mis fotos.
Realmente fue super agradable pasar de virtualidad a la realidad con dos personas en una misma semana.
El lunes por la tarde asistí a una charla en La Maison Lancôme cuyo eje era la primavera y la moda ("Como agregar un toque fresco y primaveral a tu vestimenta"). A las 18.30 hs. llegué acompañada por mi mamá, fiel compradora de Lancôme desde mis años mozos, y apenas entramos ya nos sentimos parte del universo de glamour y estilo que la marca representa.
Con supema calidez, el personal de La Maison nos dió la bienvenida y confirmaron la inscripción con una sonrisa. Al rato nos ubicamos en la sala de la planta alta, copa de vino rosado en mano mientras degustábamos unos simpáticos macarons en combinación con el color de la jornada.
Ya con eso la recepción bastaba pero además nos dieron una bolsita con un Juicy Tubes Gloss (lo usé y deja mis labios humectados y femeninos), una muestra del exquisito perfume Miracle, una tarjeta para sumar puntos con cada compra (que viene con 300 de regalo y nos hace VIP en el momento: ¡divine!) y un cartoncito para completar y participar de un sorteo.
La marca realmente está en los detalles y sabe cómo hacer sentir especial a un invitado.
Luego de este preámbulo de mimos, Sandra Castellanos, la asesora de imagen a cargo de la charla, nos dió la bienvenida con esa calidez especial que tiene el acento colombiano. Y con esa misma calidez que iba más allá de su tonada, nos mostró qué colores iban mejor según nuestro tipo de piel, cómo podíamos resaltar nuestros rasgos con determinadas prendas y lo mejor de todo, nos hizo saber que no era importante que la gente nos mirara queriendo saber qué llevábamos puesto sino, por el contrario, buscando conocer quién lo llevaba puesto (Acá más detalles de la charla según GUIAVULEVU.COM).
Finalmente, no gané nada (los sorteos definitivamente no son lo mío) pero me fuí absolutamente feliz por haber pasado una tarde encantadora gracias a la cortesía de La Maison Lancôme -aunque no lo crean, todo fue 100% gratis- y a los consejos de Sandra que me ayudarán a encontrar lo mejor de mí a la hora de salir bella y radiante durante esta primavera que acaba de comenzar.
Los dejo con algunas fotos que tomé in situ.
¡Feliz miércoles a puro rosa!
La ropa elegida era de la nueva colección de Vitamina: ¡bellísima!
Sandra Castellanos en plena acción. A su lado, toda la gama de maquillaje que presenta Lancôme para esta temporada.
Se necesitaban dos voluntarias y ¿adivinen quién fué? Yo fui la "representante" de la piel cálida. En la foto tengo cara de preocupación pero más bien estoy atenta a las palabras de nuestra asesora.
Sandra mostraba cómo esa prenda va bien con mi color de piel ya que acentúa mi rostro.
Me enviaron por Twitter el link a un artículo de Amanda Jot, bloggera y escritora que tiene un espacio en La Nación. La sigo constantemente pero hace unos días que no pasaba a leer. Por suerte, como quienes me rodean saben de mis gustos y placeres, acá les dejo lo último de Doña Jot: Comprar y tener un orgasmo es casi lo mismo.
Disfruten de la lectura y después me cuentan qué opinan (siempre guardando el decoro, por supuesto). Yo desde ya les adelanto que estoy totalmente de acuerdo con el último párrafo.
La hermosa Primavera está a horas de comenzar. Es la estación del año que llega acompañada de aromáticas flores, soleadas mañanas, dulces besos y largos suspiros de amor. No hay con qué darle: la atmósfera romántica se instala en nosotros con los primeros avistajes a los ramos de fresias. Y como de flores la primavera está acompañada, hoy le estuve haciendo sesión fotográfica a varias de las prendas que tengo cuyos estampados van acordes al mes de septiembre.
Los invito a chusmear.
Musculosa (Zara). La compré apenas empezó el invierno pasado. Larga y cómoda.
Mismo estilo, distinto estampado (Zara). Las flores parecen de piyama, no?
Remera mangas 3/4 (Umbrale). La compré en Chile hace 2 años. Ahora este estampado está de moda pero en su momento era super original.
La espalda tiene el detalle de un frunce que marca la cintura. Además el modelo es de un sutil
corte irregular.
Otra cosita más: adelante trae un bolsillo. ¡Monono!
Vestido (Complot). Es de hace unos años y lo amo. Es mi comodín veraniego porque va solo o con leggings, con botas o tacos. La tela tiene buena caída y es ideal para cuando hace mucho calor.
Camisa (Ver). Tiene flores como para marearse. Es de este otoño.
Remera (Ver). Rosa vivo y excelente tela. Integra mi placard desde marzo de este año.
Saco corto, mangas 3/4 (Emma James). Una amiga me lo regaló hace un tiempo (a ella también se lo habían regalado pero no le cerraba la onda para usarlo). Pensé: "¿Cómo puedo combinar esto?" y así durmió unos años entre mi ropa. Hoy que las flores están de mega moda y los sacos también, ¡tengo el mío!
Luego de este floreado repaso por mi vestidor, les cuento que esta tarde tengo una cita en La Maison Lancôme donde voy a participar de una charla de moda sobre las tendencias de esta primavera/verano. ¡Mañana les cuento!
Son las 10.23 hs. de la mañana y tengo que peinarme, maquillarme y vestirme para estar a las 13 hs. en Plaza Armenia. Teniendo en cuenta que demoro en arreglarme algo así como una hora y que el 140 demora 40 minutos (si es que no se pone a hacer de guía turístico y va a 20 kms. por hora), tengo cerca de 30 minutos para distraerme en otras cosas. Aprovechando ese tiempo, les traigo un post digno de viernes: cortito y cholulo.
El miércoles arrancó "Caín & Abel", la nueva ficción de Telefé y confieso que luego del paso de "Botineras" no le ponía muchas fichas al producto venidero pero ya la promo que hacía el canal me parecía atractiva.
A las 22.30 hs. estuve cómodamente instalada frente a mi televisor y me dejé sorprender con la historia de la famila Vedia. Habiendo visto el capítulo de ayer, a priori puedo hacer las siguientes observaciones/conclusiones:
Joaquín Furriel es el actor más lindo de este país (a priori, a posterior, ad infinitum). Nada de Arana, Echarri o Gonzalo Heredia. ¡Fushhhh! Lo que distingue a Joaquín es que se ve prolijo, tiene unos ojazos que resaltan con su color de pelo y además es super varonil. Los otros para mi deberían estar saltando entre palmeras y buscando cocos.
Más puntos para Furriel: lo están vistiendo bárbaro. El abrigo que tenía cuando llegó a Buenos Aires más la camisa que se puso en el casamiento de Simón, dan cuenta de que quien lo tunea tiene excelente gusto.
Único punto en contra de este encanto: cuando se ríe se ve raro.
Hablando de looks, el corte de pelo de Antonio Birabent está muy en la onda "PalermoSohoDecontracté". Un estilo similar lleva Nicolás Pauls. No me gusta.
El peinado de Fabián Vena tampoco es de mi agrado pero me parece que va acorde al personaje.
Hablando de Fabián, hay algo que es mega obvio y lo anticipo ya (!): se va a volver loco mal. No creo que en mucho tiempo derrape y se transforme en el villano que tan bien sabe interpretar.
Considero que Luis Machin es el mejor de los actores de esta ficción. Le pisa los talones Federico D'Elia.
Ayer morí de risa con una escena. La actriz que interpreta a Beatriz le dijo a Joaquin Furriel que sus problemas en el toilette ("haciendo lo segundo") no eran corporales: "Me derivaron a un psicólogo". Con música dramática enfocaron los ojos de Furriel totalmente desorbitados. Digo yo, ¿acaso no es más que normal que si somatizás problemas te deriven a un psicólogo?
Para finalizar, la cortina musical me parece suprema. No me gusta Andrés Calamaro pero esta versión del tema de Vox Dei es un 10. Los dejo con ella.
Como alguna vez les he contado, me encanta revisar las múltiples opciones que tiene el StatCounter respecto de las visitas a mi blog. Acabo de comprobar que existen nuevas frases/preguntas/palabras por las que han llegado a leerme y en este post voy a tratar de responder algunas de las cuestiones que llevan a que alguien se choque con este espacio.
Pregunta dificil de responder pero me toca de cierta forma porque con mi novio tenemos un placard hecho en su estructura pero nos faltan los interiores. Armarlo por dentro es casi 3 veces más caro que crear el esqueleto (el nuestro es de durlock). Averiguando por ahí, un interior a todo trapo sale cerca de $4000 y con "todo trapo" me refiero al Terminator de los interiores: madera maciza, cajones especiales para las camisas y para las corbatas, etc.
Si uno busca una opción más barata (¡nosotros!), se puede empezar comprando un barral de metal en Easy y mandar a hacer unos cajones a medida. Ya he recomendado que tener la ropa colgada es mucho mejor asi que propongo un gran barral y que los cajones tengan las minucias que no van colgadas.
Acá es importante saber si es hombre o mujer quien pregunta. Si es hombre (¡que lindos son los sacos de pana en hombres, my God!) lo mejor es acompañar con una camisa formal pero usada casual -sin corbata-. Ojalá a cuadros y con cuello de distinto color. Destierren las poleras y las remeras para esta combineta: no van.
Ahora si quien pregunta es una dama, diría que se puede usar casi con cualquier cosa pero respetando los largos del saco. De ser un blazer es distinto: ahora se usa más corto con algo más largo; pero el saco de pana es más delicado y suele ser entallado.
Para la noche quedaría bien con una remera de encaje y para el día con una camisola en tono pastel.
3) ¿Qué me pongo debajo de una musculosa de encaje?
Dos opciones: un lindo soutien al tono de la musculosa u otra musculosa, de esas de lycra bien pegaditas al cuerpo (en Zara las venden todo el año: son cortitas y con breteles finos) respetando el color si es negro, y si no alternando a colores más claros: si la musculosa es blanca, la de abajo puede ser manteca, y viceversa).
En este caso vamos a suponer que quien nos habla es mujer. Ahora se viene el look navy que es hermoso. El saco azul queda justo para esta tendencia y lo de abajo puede ser negro, rojo, blanco, celeste, lila y hasta rosa. También podemos jugar con las rayas y los estampados florales. Para hacer el saco bien trendy, le cambiaría los botones por unos dorados.
Esto depende del tipo de cuerpo. Las calzas de jean no estilizan tanto como las que estamos acostumbradas a usar (negras, flores, etc.). Si no estamos para el desfile de Giordano, botas largas y botinetas es la mejor opción: nos tapan los tobillos y así estilizan la pierna. Ahora si podemos ponernos lo que sea porque nuestro cuerpo es digno de tapa de revista, unas lindas ballerinas pueden acompañar y hasta unos stilettos. Ahora también se vienen los zuecos: otra buena opción.
Gracias a los angeles querubines (por innovar y no decir "Gracias a Dios"), ¡con lo que se te ocurra! El suela es el nuevo negro: combina con todo y si no, lo hacemos combinar de alguna forma. La moda hoy permite reinventarnos constatemente y hasta ser trendsetters sin necesidad de llamarnos Victoria Beckham.
Seguro lo deben haber visto pero no está de más recordarlo. El ya famoso Her-Nan, listo para usar su Tarjeta Naranja. Les dejo el video para que vean como Her-Nan es miembro vitalicio de este blog.
♪ ♪ El Shopping Center quedará vacío, Her-Nan comprará hasta el final ♪ ♪
¿Qué tienen en común el Dot Baires Shopping un día de semana y el Super Miércoles Mujer del Santader Río? Es fácil: ¡mi sonrisa!
Hace 3 semanas no voy a trabajar. La Facultad en la que trabajo está tomada y tengo "de arriba" unas vacaciones inesperadas. Sépanlo: nunca me alcanza el tiempo para la pachorra (de hecho termino de escribir esto y me hago una siestita); pero tantos días en casa termina siendo un poco embolante. Es por ello que ayer partí al Dot pasado el mediodía para ver con qué me sorprendía; a ver si entre alguna prenda y yo surgía un amor a primera vista (y a 6 cuotas sin interés).
Caminar por un shopping un día de semana a la tardecita no tiene parangón. Poca gente (la que hay va tranquila, disfrutando su paseo) y por ende, mucho espacio libre. Sumémosle a esto que el lugar elegido es el Dot: un shopping enoooooorme, muy bien puesto en cuanto a sus locales y con marcas de todo tipo (desde los exclusivos chocolates Lindt hasta Ted Bodin).
Con un jugo de naranja en mano que compré en Starbucks, empecé a caminar por el mejor paisaje para una compradora compulsiva: las tiendas. Éstas estaban altamente mononas con su cartelito en la puerta anunciando la promo del Santander Río.
Fui directo a mi primer objetivo, a lo que necesitaba: jean oxford. Paula Cahen D'Anvers fue la marca que me mostró el modelo del cual me hice novia instantáneamente. No tengo que entrar en detalle con los precios: temo que los cardíacos que leen este blog caigan fusilados.
Con mi bolsa portando el artículo deseado emprendí recorrido al resto de los pisos del shopping. Como esa mañana había leído un post en otro blog sobre Ver, partí directo al local para chusmear la nueva colección. Por desgracia no la tenían completa pero realmente me gustaron mucho las cosas que exhibían: énfasis en lo femenino y en la comodidad. Lindos colores, vivos y también sutiles. Buenas telas, detalles de encaje y de broderie. Fue una total satisfacción entrar al probador con 8 cosas. No se asusten: no me llevé todo.
Los precios son super accesibles y eso da gusto ya que llevás prendas de calidad pagándolas a un precio más que razonable (no así en Yagmour que tienen ropa similar a casi un 45% más). Hay remeras desde $50, vestidos desde $120 y musculosas desde $45.
Si quieren chusmear el lookbook de la marca, hagan click aquí.
Terminado el vistazo en Ver, mi dejo de responsabilidad financiera me gritaba que ya no hacía falta nada más asi que me dediqué a caminar un rato, previa compra de unos aros y un anillo en Isadora (¡inevitable!).
Ya casi con un pie afuera, Falabella me susurraba al oído que me tenía que hacer una escapadita hacia sus adentros para pispear, un touch and go nomás. Entré como quien no quiere la cosa, con cara de "Estoy mirando... larailarailarai... no le hago daño a nadie... larailarailarai" (hoy temprano tomé mi medicación, tranquilos). Luego de dar dos vueltas invicta y viendo el brillo de la salida a escasos metros, una camisa divina se me tiró encima (!) y no pude más que llevármela. ¡Yo no teno la culpa si la ropa me aclama, che!
Al margen de mi compra, recomiendo la nueva colección de Falabella. La de invierno me pareció feísima pero esta es juvenil, es delicada, es moderna y es femenina (la apuesta de casi todas las marcas esta primavera/verano). Además, los precios acompañan: remeras desde $70, camisas desde $90, leggings floreadas desde $60 y chatitas desde $150.
Que día choto, no? La primavera se insinuó pero volvió a esconderse. Menos mal que falta poco para que el clima finalmente cambie y tengamos jornadas con temperatura agradable y noches aromáticas.
Hace un ratito estaba chusmeando el blog de Dnn y me sentí identificada con su último post: el SPM avanza galopante, hace casi dos semanas que no voy a trabajar porque la Facultad está tomada y además los fines de semana no significan un momento de descanso ya que sigo con mis labores de obrera en lo que será mi próximo hogar. Al despertar esta mañana y ver lo gris del día pensé que más no podía pasar pero... (¡siempre los hay!) como todo esto es momentáneo, decidí armar un artículo en el que detalle las cosas que amo. Esto es algo así como un ejercicio de autoalegramiento (?) y mimos extra a la autoestima.
Las cosas felices de mi vida van por varios caminos asi que pensemos que todo sale "desde el vestidor" de mi interior. Eso si, como bien me enseñaron en el colegio, el orden de los factores no altera el producto asi que lo listado, en mayor o menor medida, es objeto de mi más profundo afecto.
¿Ustedes qué cosas aman? De mi les digo que amo:
El aroma que tienen las mañanas de primavera (¡ya llega!).
Escuchar música mientras estoy en la cinta.
La lista interminable de carteras y botas que integran mi placard.
Poder acurrucarme debajo de su cuello y sentir que no hay mejor lugar para vivir.
La vuelta a casa cuando el sol sigue brillando.
Los perfumes con aroma a vainilla.
Las manos de mi mamá.
Mis medias polar de conejo para una noche fría.
¡El cierre de la tarjeta de crédito!
Reirme de mi misma.
Las meriendas "chanchas".
La noche del viernes.
La ropa nueva.
Mi jogging agujereado.
El olor del interior de un auto luego de que le dió el sol.
El revistero de mi baño.
Pedir porción extra de sushi sólo para mi.
Los gorriones.
El "mueble" que construí en mi baño con unos ladrillos y unas tablas.
Dormir en sábanas recién lavadas.
Secar la ropa al sol.
Leer en el balcón.
La siesta.
Su sonrisa.
Cantar en la ducha.
Mi taza de té con leche.
¡Los regalos!
El antes y el después de nuestro hogar.
Living ANTES
Living DESPUES
Mi Noni.
La ansiedad antes de los viajes.
Mar de las Pampas.
Las flores en mis plantas (milagrosamente salen aunque las riego una vez por semana).
Los planes en conjunto.
Expresar los sentimientos.
A Diego.
La vida que me tocó vivir.
Ciertamente hay más cosas que despiertan mi felicidad y rescato estas en el día de hoy. Ni siquiera el loco de Blogger, que me modifica los espacios y el formato como se le canta, podrá sacarme la sonrisa luego de pasar revista a tanta cosa linda.
PD: Nada que ver con nada, ¡pero nada que ver mal! Ahora que tengo estos días libres del trabajo me veo todos los programas pedorros de chimentos. Ya sé quién es Amigacho (¡ayy!) y que Graciela Alfano inventó lo de la sangre en el labio pero hay algo que no comprendo bajo ninguna lógica: ¿cómo puede ser que Tomasito, siendo el hijo (del corazón o de lo que sea) de Guido Süller, acepte casarse con el? Se quieren casar y se gustan, ¡genial! Pero si se declaran padre e hijo, ¿no hay algo que no cierra? Dejo esta profunda reflexión para ustedes.
Hay grandes misterios sin resolver. El enigma de la identidad de la famosa Mona Lisa es uno de ellos. Aparentemente su nombre era Lisa Gherardini y era esposa de Francesco Bartolomeo del Giocondo (de ahí lo de "La Gioconda"). También se dice que era una cortesana pero hay hipótesis que apuntan a que era una modelo irreal imaginada por Da Vinci; ¡y hasta se dice que era el propio Leonardo!. Como sea, sigue siendo un misterio.
Hablando de cuestiones sin explicación, el Triángulo de las Bermudas es un dolor de cabeza para científicos, místicos e investigadores. Se lo conoce como "Triángulo del Diablo" y "Limbo de los Perdidos" (¡que miedito!) y acá las teorías son varias: desde que hay piratas que secuestran gente hasta que existe un agujero en el océano que succiona lo que transite por ahi, pasando por extraterrestres, restos de la Atlántida y campos magnéticos. ¿A qué llegamos con todo esto? A nada. Seguimos con la incertidumbre y la vida continúa (lo bien que hace en seguir).
Hoy decidí sacar de la lista de misterios a uno que data de épocas lejanas. Tengo ganas de echar luz sobre este enigma femenino (que es parte de mucho otros pero vamos despacio que quiero que las mujeres sigamos manteniendo nuestro encanto) y revelar la verdad absoluta que hostiga a hombres de todas las edades: ¿QUE HAY EN UNA CARTERA?
Un amigo un día me dijo: "¿Por qué no contás qué hay dentro de la cartera de una mujer? Le podés poner al artículo Un mundo bajo cierre". Estuve muchos días pensando si era correcto dar esta información; si luego de darla, el género masculino comprendería más la psiquis de las mujeres o usaría estos secretos en su contra. Decidí que es bueno que se conozca nuestro interior y la cartera es una buena forma de comenzar.
Me tomo como caso testigo y mi mundo bajo cierre contiene lo siguiente:
1) La billetera. Podríamos decir que es un mundo dentro de otro mundo. Además del dinero y las tarjetas hay un millón de cosas que no deberían estar pero descansan ahí cual sereno de chacra. La info detallada queda para otro post. Esta belleza, claro está, es de Prüne.
2) Anteojos de sol. ¡Obvio! Los compré hace dos años en La Mercería.
3) Anteojos de lectura.
4) Lip Gloss. Es de Dior: una mononura.
5) Manteca de Cacao. ChapStick es la marca. Este vino de US pero acá se comercializa hace rato.
6) Beldent. Frutas Tropicales o algo así.
7) Colita para el pelo. Uno nunca sabe cuando la temida humedad nos puede atacar.
8) Gancho para el pelo. ¡Lo amo! Es de La Mercería.
9) Base. Dream Mat Mousse de Maybelline (abajo su esponjita para aplicar).
10) El celular. Es un Sony W300i o Walkman. Ya está pidiendo recambio hace rato.
Y ese es tooooooooodo el misterio. A veces agrego cosas según el día: un paragüas, un cable USB, el cargador del celular, una manzana, saquitos de té, un perfume, delineador de ojos; en fin, lo que necesite. Pero estas cosas que acabo de detallar son el básico en lo que a cualquier cartera respecta.
Habiendo entregado esta información ultra top secret al mundo, me encantaría saber qué llevan mis lectoras femeninas en sus carteras y qué hay en las guanteras de los autos de los hombres: ¡eso sí que es un despiole! Si los caballeros que leen este blog tienen un bolso o portafolios, sean amables de compartir la lista de objetos que lo completan.
Y si, es obvio: nuestro guardarropa vale más de lo que cuesta. Eso es por varias cosas. Hay prendas que hemos visto en vidriera días y días y hemos ansiado poder tenerlas, y luego las compramos. También hay cosas que representan ciertos momentos importantes de nuestras vidas: lo que nos pusimos en una primera cita; lo que estrenamos en una reunión laboral; eso que nos quedó divino en una fiesta pasada.
En fin, somos lo que vestimos. Nuestro placard es un espejo al mundo y no me estoy refiriendo a lo caro que podamos tener sino a eso que nos completa y resalta nuestra personalidad.
Les dejo el video de Skip y me gustaría saber: ¿cuánto vale tu guardarropa? El mío está fuera de todo cálculo (y eso que la foto es sólo una mitad).
Hace unos día escribí un post en el que, además de mostrar unas botas que integran mi vestidor, me pregunté sobre la existencia de Thomas Taw. Para quienes no saben, aparentemente este hombre es un capo en lo que a pelo respecta y es parte del equipo de "maestros peluqueros" que Sedal contrató para sacar sus productos Co-Creations.
Yo cuestioné su fama y su saber y por lo visto le llegaron mis palabras y buscó contacto conmigo para demostrarme sus cualidades estilísticas.
Aquí las pruebas:
"Llegó carta a casa. Seguro es una cuenta para pagar"
"En efecto, es carta para mi pero..."
"No es una cuenta. ¿Sedal y Jumbo? Mmmm..."
"Sedal me está invitando a retirar por Jumbo un shampoo y acondicionador gratis. Thomas, ¿querés convencerme de que sos groso?"
"El equipo completo me saluda"
"Tengo que reconocer que es una buena forma de incentivar a la compra de sus productos. ¡Viva la muestra gratis con tamaño real! ¡Y viva Thomas Taw!"
Sepan que la adulación final es sólo para que cuando este buen hombre y su team de superamigos del pelo saque algún producto nuevo, me tengan en cuenta para probarlo. Por lo pronto, la próxima vez que pase por Jumbo (mi supermecado favorito -¡esto lo digo en serio!-) me llevaré mi regalo.
Ahora bien, si alguna vez hablé de Mr. Taw y me llegó esto a casa, cuando hablé de Jude Law, ¿lo tendré por ello tocando el timbre de mi departamento en breves? ¡Cruzo los dedos!
